El cobre de referencia en la Bolsa de Metales de Londres bajó un 2,2%, a 8.720 dólares la tonelada, a las 1611 GMT, el mayor descenso diario desde el 15 de marzo.
Reuters.- El cobre cayó el martes, ya que la debilidad de los datos económicos en Estados Unidos generaron preocupaciones por las perspectivas de crecimiento mundial y por la demanda de metales.
Los mercados bursátiles caían ante la evidencia de un enfriamiento del mercado laboral y la escasez de pedidos de productos manufacturados en Estados Unidos, tras el sorpresivo recorte de los objetivos de producción por parte de la OPEP+ durante el fin de semana, que hizo subir los precios del petróleo, amenazando con un repunte de la inflación.
El cobre de referencia en la Bolsa de Metales de Londres bajó un 2,2%, a 8.720 dólares la tonelada, a las 1611 GMT, el mayor descenso diario desde el 15 de marzo.
Los mercados chinos permanecerán cerrados hasta el jueves por la mañana por un festivo.
El cobre ha subido desde un mínimo de 6.955 dólares el pasado julio, luego que el principal consumidor, China, abandonó sus restricciones por el COVID-19, perjudiciales para la economía, pero la subida de las tasas de interés y la preocupación por la economía mundial y los préstamos bancarios alejó los precios de un máximo de 9.550,50 dólares de enero.
«Es probable que la mejora de la demanda china se vea contrarrestada por la preocupación por el crédito en Estados Unidos y Europa, la fuerte oferta de las minas y el aumento de la producción china de cobre refinado», dijeron analistas de BNP Paribas, que prevén «un alza limitada de los precios en el segundo semestre de 2023».
La demanda china no ha aumentado tanto como muchos esperaban.
Los analistas de Guotai Junan Futures señalaron que los pedidos de la empresa china State Grid no habían cumplido las expectativas y que los nuevos pedidos de la industria solar y de alambres y cables se habían contraído.
Sin embargo, muchos analistas e inversores siguen siendo optimistas.
«El aumento de la demanda (de cobre) por vehículos eléctricos, generación de energía renovable y almacenamiento y transmisión de energía ya está compensando la ralentización inmobiliaria en China (…) y una desaceleración económica en Occidente», dijo el estratega de Saxo Bank Ole Hansen.
En su opinión, la perspectiva de una oferta ajustada en los próximos años debería llevar al cobre a máximos históricos por encima de los 10.845 dólares en la segunda mitad de 2023.
El aluminio LME bajaba un 1,3% a 2.366,50 dólares la tonelada, el zinc descendía un 2% a 2.839,50 dólares, el níquel retrocedía un 1,2% a 23.095 dólares, el plomo perdía un 0,2% a 2.110,50 dólares y el estaño caía un 4,3% a 24.930 dólares.
