El dinamismo con que se mueve la minería genera una creciente actividad entre todos sus proveedores y si bien la actual coyuntura ha estado marcada por algunos proyectos estancados y otros que no tienen fecha de inicio; los proveedores de mallas y cercos siguen trabajando arduamente para ofrecer y dotar de las mejores soluciones al rubro minero en todo momento.
Antes de continuar, recordemos que los cercos son un sistema de cerramiento desarrollado para satisfacer la demanda de seguridad perimetral a la unidad minera. Puede constar de una malla tejida de simple torsión que cuenta con características específicas de acuerdo con los requerimientos mineros o también de una malla extruida que es usada en muchos casos.
Así, en el rubro minero existen diferentes diámetros de las mallas usadas que pueden ir desde los 30gr/m2 hasta los 610 gr/m2, que se caracterizan por ser las de mayor duración. Además, cabe indicar que todo el proceso de fabricación de las mismas se encuentra completamente automatizado.
De igual manera, los cercos perimétricos, que constan de mallas y parantes, presentan también otro tipo de ventajas, intrínsecas en el producto, tales como una alta durabilidad gracias al alto contenido de galvanizado, baja inversión en mantenimiento, variedad y excelencia en sus presentaciones, entre otras.
Pero además, de las mallas usadas para cercar zonas perimetrales o interiores de las minas, existen las geomallas, muy utilizadas en minería, puesto que sirven como refuerzo para suelos, por donde pasan grandes maquinarias pesadas o evitar la caída de piedras en determinadas zonas de las operaciones.
En ese sentido Rumbo Minero, converso con los principales actores de estos mercados con el objetivo de conocer más acerca de las características de estos productos, y cómo se viene desarrollando el mercado hasta la actualidad. A continuación los principales.
CIDELSA
Compañía que tiene 48 años de historia llena de éxitos en ofrecer grandes soluciones para diversos sectores económicos del país. Desde sus inicios comercializaron el uso de los geosintéticos con las geomembranas para la impermeabilización, y luego incursionó con las geomallas, que desde un primer momento se utilizaron para el refuerzo de suelos, para luego migrar a otro tipo de aplicaciones.
Actualmente, la firma puede atender desde la ingeniería del diseño de soluciones, suministro, asistencia técnica e instalación de muros de suelos reforzados, refuerzos de pavimentos, repavimentaciones, protecciones para caída de piedras, entre otros.
En el campo de la minería, Cidelsa ha ido creciendo año tras año. “La demanda está en función de los proyectos, y el año pasado la minería ha tenido una serie de complicaciones en el tema social que retrasaron importantes proyectos mineros. Este año lo vemos con optimismo y esperamos se reactiven y/o continúen las operaciones pese a estos conflictos”, informa Gabriela Monje Roldán, Jefa de Producto de los Geosintéticos.
Y ¿qué son las geomallas? Las Geomallas son parte de la familia de los geosintéticos y son estructuras planas, abiertas, con arreglos cuadrados, rectangulares o triangulares conectados entre sí, ya sea una unión continua extruida o tejida, que según la distribución de sus resistencias pueden ser monoaxiales, biaxiales o multiaxiales.
Se fabrican de polímeros como el Polipropileno, Polietileno y Poliéster. En el caso de este último, puede tener un recubrimiento adicional de protección por ejemplo con recubrimiento en PVC y Copolimeros para aplicaciones expuestas o bitumen exclusivamente para aplicaciones en vías que van a ser pavimentadas por su buena adherencia con el asfalto.
En las monoaxiales, la resistencia se orienta en una dirección en particular; mientras que en las biaxiales, los esfuerzos están distribuidos en forma similar, tanto en sentido longitudinal como en el transversal; y en el multiaxial, los esfuerzos son radiales.
Para el rubro minero son requeridas todas, dependiendo de la aplicación para la que se necesiten.
(El informe completo se encuentra en la edición impresa y virtual de su revista RUMBO MINERO Nº 87)
