Juan Carlos Liendo advirtió que la minería ilegal se ha convertido en un poder fáctico con influencia política, económica y electoral.
El exjefe de la Dirección Nacional de Inteligencia (DINI), Juan Carlos Liendo, alertó sobre la consolidación de la minería ilegal como un poder fáctico en el Perú, con creciente influencia en la política y en el diseño del próximo gobierno. “Estamos viendo el surgimiento de un poder fáctico basado en la actividad minera, y cuando se habla de ilegal, formal, artesanal, ancestral, todos conviven”, declaró para diario Gestión.
Liendo afirmó que esta red de informalidad logró representación en el Congreso y podría condicionar las próximas elecciones, con un peso determinante en la composición del futuro Ejecutivo. “Tienen ya representación congresal y van a dominar las elecciones”, dijo. En su análisis, el Perú atraviesa una transformación peligrosa: “Lo que estamos viendo es la crisis del surgimiento de un nuevo tipo de país con riqueza, pero una degradación moral y el crecimiento del crimen desbordado”.
Uno de los mayores riesgos, advirtió, es el posible colapso del sistema de concesiones mineras ante la presión de este poder emergente. “Nuestra gran minería, los principales ingresos formales del país, corren el riesgo de ser desarticulados por una presión política, social y económica como nunca en la historia”, puntualizó. Esta situación amenaza con desestabilizar las principales fuentes de ingresos formales del país.
Finalmente, Liendo sostuvo que la influencia de la minería ilegal no solo pone en jaque la economía formal, sino también el equilibrio del Estado de derecho. En su opinión, este nuevo poder paralelo, sin control institucional, redefine las reglas del juego en la sociedad peruana. “El sistema de concesiones con este nuevo poder colapsa, es insostenible”, concluyó.