El Comando Unificado de Pataz (Cupaz), dependiente del Comando Operacional del Norte, nació como la respuesta directa del Estado al brutal atentado perpetrado por mineros ilegales el 12 de febrero de 2024. Desde entonces, se ha convertido en el brazo firme de la estrategia gubernamental para recuperar el control en una de las zonas más golpeadas por la minería ilegal.
En su más reciente balance, el Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas reveló el verdadero impacto de sus operaciones: las mafias mineras han sufrido pérdidas valorizadas en S/ 1,288 millones. Un golpe que no solo debilita su poder económico, sino que envía un mensaje claro: el Estado no cederá terreno frente a la ilegalidad.
Material intervenido
En lo que va del año y hasta el 3 de septiembre, las fuerzas del orden han interdictado 68 bocaminas, 20 socavones y 42 campamentos ilegales, cortando la logística y capacidad operativa de las organizaciones criminales.
Operativos ejecutados
Se reporta un total de 31 operaciones, entre las que destacan las denominadas Lobo, Avatar, Cueva, Apocalipsis, Yanahuima, Escalibur y Centauro, desplegadas en distintas zonas de Pataz, uno de los principales focos de minería ilegal en el país.
Detenciones y armamento incautado
Las acciones conjuntas permitieron la detención de 48 personas presuntamente vinculadas a la extracción ilícita de oro. Además, se decomisaron 50 armas de fuego, incluyendo carabinas, pistolas y fusiles, así como 12,260 municiones de diverso calibre.
Articulación interinstitucional
El balance resalta la participación de entidades como el Ministerio Público, Ministerio de Energía y Minas, SUNAT, SUCAMEC, SUTRAN, GREMI y Migraciones, lo que refuerza la estrategia multisectorial para frenar esta actividad ilegal.
Con estos resultados, el Comando Unificado reafirma su compromiso de debilitar las estructuras criminales que operan en la zona, no solo por los daños ambientales que ocasionan, sino también por el impacto en la seguridad ciudadana y la economía nacional.