ECONOMÍA. Economía peruana crecerá 4% en el 2017, afirma Intéligo SAB. En 2017 la economía peruana crecerá alrededor de 4.0%, previéndose una contribución cada vez menor de la minería pero también una aceleración de la construcción de infraestructura, proyecta Intéligo SAB en su reciente reporte Estrategia Global.
De acuerdo con el análisis la producción minera seguirá creciendo hasta fines de año pero su impulso será cada vez más acotado, con un aporte al crecimiento del PBI de solo 0.4 puntos porcentuales. Al cierre del 2016, el PBI habría crecido en 3.8% y el aporte del sector minero sería de 1.9 puntos porcentuales gracias a un crecimiento record de su producción, señala la casa de bolsa del Grupo Intercorp.
Intéligo SAB prevé la aceleración de la construcción de infraestructura, sobre todo en los proyectos más grandes como la refinería de Talara, el Gasoducto del Sur, la Línea 2 del metro de Lima y el aeropuerto de Chinchero. Se espera que la inversión en proyectos de infraestructura aumente de US$ 2,184 millones en 2016 a US$ 4,164 millones en 2017, lo que implica una contribución de 1.5 puntos porcentuales al crecimiento del PBI.
«Además de la mayor inversión en infraestructura, es importante destacar que la caída de la inversión minera registrada en 2016 por la culminación de proyectos mineros -tales como Las Bambas y Cerro Verde-, se revertirá durante 2017, dejando de ser un lastre para el crecimiento de la inversión privada», señala el reporte.
Consolidación fiscal
El reporte Estrategia Global recuerda que a fines de septiembre el MEF estableció medidas extraordinarias para limitar el gasto en los últimos meses de 2016, para cumplir las metas fiscales que establecen un déficit máximo de 3.0% del PIB. Para contener el déficit, el gobierno dio un importante ajuste en octubre, que continuó los meses siguientes. «Sin embargo, es importante notar que los ajustes se han dado más por el lado del gasto de capital que por el del gasto corriente, dada la dificultad de recortar personal o reducir sueldos», refiere Intéligo SAB.
El gobierno ha anunciado que a partir del próximo año buscará el descenso del déficit de 2.5% del PBI en 2017 a 1.0% en 2021. Ello implica, anota el reporte, que el impulso fiscal pasará de positivo en 2016 a negativo en este año y el ritmo del gasto público se ralentizará.
Seguidamente, el reporte destaca que el presupuesto público del 2017 no contiene una reducción de gastos corrientes pero sí una reducción de impuestos, como la del IGV a partir de julio próximo. «Este plan de consolidación fiscal podría impactar en la inversión pública y por ende en el crecimiento de la actividad», añade Intéligo SAB.
(BQO)