El presidente de Estados Unidos instó a la Unión Europea a aplicar gravámenes máximos a los países asiáticos por comprar petróleo ruso. La iniciativa busca recortar los ingresos de Moscú y forzar el fin de la guerra en Ucrania, aunque Europa se muestra reticente.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, pidió a la Unión Europea (UE) imponer aranceles del 100% a China e India, principales compradores de crudo ruso. Según informó Reuters, el mandatario trasladó esta iniciativa en una reunión con altos funcionarios europeos, señalando que Washington estaría dispuesto a igualar los gravámenes si Bruselas adoptaba la medida.
El objetivo sería asfixiar los ingresos energéticos de Rusia y aumentar la presión sobre el gobierno de Vladímir Putin para poner fin a la guerra en Ucrania.
Europa duda de la viabilidad de la medida
No obstante, la Comisión Europea ha manifestado que este tipo de gravámenes, a diferencia de las sanciones, requiere investigaciones legales complejas y podría tener un alto costo político y comercial. Bruselas teme un impacto directo en las negociaciones en curso con China e India, lo que hace poco probable la adopción de los aranceles en los términos planteados por Trump.
¿Qué alternativas estudia Bruselas?
Ante la dificultad de implementar aranceles generales, las autoridades europeas evalúan sanciones focalizadas sobre bancos, refinerías y compañías vinculadas al comercio de petróleo ruso. Esta alternativa busca mantener la presión sobre Moscú sin comprometer acuerdos comerciales estratégicos con Asia.
Contexto geopolítico complejo
La propuesta de Trump se produce luego de que expirara el plazo que dio a Putin para reunirse con Volodímir Zelenski, presidente de Ucrania, sin avances concretos. Mientras tanto, Moscú ha intensificado los bombardeos, con ataques recientes que dejaron varias víctimas civiles en el este del país.