Según el último Ranking PAR de Aequales, en las empresas del sector de minería y energía se observa una pirámide invertida donde casi una tercera parte del promedio de juntas directivas están representadas por mujeres. En línea con ello, por ejemplo, en el Clúster Andino de Schneider Electric, el aumento de mujeres en los cargos directivos suma 27.8%; asimismo, en el comité de dirección, las mujeres tienen una participación de 33.3%, lo que es muy significativo para un nivel ejecutivo de alto rango; y la meta de la empresa es lograr una participación del 37%.
De igual manera, este mismo informe, indica que hay un descenso considerable en la participación femenina desde el segundo nivel hasta llegar a las posiciones administrativas u operativas. Un dato que la compañía tiene claro, y que fortalece aún más el compromiso por el crecimiento y liderazgo de las mujeres al interior de la organización; y para ello, en cada convocatoria de profesionales, por cada tripleta deben tener como mínimo una aspirante al cargo.
Al respecto, Mario Velázquez, Country Manager para Perú y Bolivia de Schneider Electric, afirma, “En esta industria o en cualquier otra debemos medir por capacidades y talento, para que haya una paridad en todos los niveles; por ello, en la compañía hemos tomado acción con iniciativas que promueven la igualdad de género y empoderamiento de las mujeres en todos los mercados en los que operamos”.
El negocio en el que se desarrolla la empresa, entre la gestión eficiente de la energía y la automatización, históricamente no ha atraído a la población femenina, al igual que en los sectores industriales con los que trabajan. “Los distintos informes de equidad de género, en general, concluyen que las mujeres tienen menos oportunidades de alcanzar posiciones de liderazgo; y cuando se trata de Ciencias Exactas, el déficit es aún mayor, y son pocas las que acaban ingresando en la industria”, comenta el ejecutivo.
Hay una clara correlación entre la diversidad y el rendimiento de las empresas, y en Schneider Electric están convencidos de ello, ya que la diversidad y la inclusión generan mayor innovación, creatividad, compromiso, colaboración y desarrollo de sinergias entre los equipos. Todos ellos ingredientes necesarios para crear un ambiente de trabajo exitoso en un mundo cada vez más competitivo y digitalizado.
Por otro lado, Velázquez agregó que a pesar de que los datos arrojados por el Informe Global sobre la Brecha de Género 2018 del Foro Económico Mundial, no son muy alentadores, ya que la igualdad de oportunidades laborales entre hombres y mujeres ha retrocedido; las organizaciones deben continuar con sus esfuerzos en el desarrollo de iniciativas que permitan generar una cultura más diversa e incluyente al interior de sus organizaciones y por ende en la sociedad. “Nuestra compañía muestra un panorama optimista por nuestra fuerte cultura inclusiva, a partir de las prácticas en el sector energético, las cuales contribuyen al cierre de las brechas de género, a incrementar el empoderamiento de las mujeres y desarrollo de la diversidad e inclusión; las mismas que se pueden replicar en las distintas industrias del país y la región” añadió.
Así, una medida que incentiva la equidad de género es que la firma ha logrado que el 94% de las mujeres peruanas ganen igual que los hombres y la meta para este año es llegar al 100%. Esto se logrará gracias a la iniciativa Gender Pay GAP, una herramienta con la que Schneider Electric busca ser equitativa, para garantizar que la compensación proporcione igualdad salarial para todos los colaboradores, haciendo énfasis en la nivelación salarial de las mujeres.
Igualmente, la empresa cuenta con el programa Women at Work donde se fortalece el crecimiento laboral desde la base de la pirámide para ir escalándola gracias a los resultados y el buen desempeño. En el Clúster Andino conformado por los países como Colombia, Ecuador, Venezuela, Perú y Bolivia, hay 56 mujeres participando de este proceso, de las cuales 10 son peruanas y dos de ellas ya han sido ascendidas. Así, por ejemplo, a inicios de este año una peruana fue transferida para un cargo de mayor impacto en Brasil.
Entre otro de los programas que fomentan la diversidad e inclusión está la “Mentoría”, una herramienta que permite que hombres y mujeres intercambien experiencias, conocimientos y puntos de vista, siempre con el propósito de apoyar el crecimiento profesional de mujeres talentosas y acelerar sus carreras para posicionarlas en puestos de liderazgo.
“Continuamos avanzando en el desarrollo de la población femenina a lo largo de todo su ciclo de vida profesional, para garantizar su empoderamiento y promover el mejor talento a los niveles más altos de nuestra organización” agregó el Country Manager.
Finalmente, vale resaltar que Schneider Electric ha sido reconocida por Equileap, Bloomberg y, más recientemente, Catalyst, por el liderazgo en igualdad de género e inclusión.
*foto referencial
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