Los precios del petróleo registraron una ligera alza este martes, impulsados por señales de una demanda sólida y en medio de expectativas ante la próxima decisión de la OPEP+ sobre sus niveles de producción para agosto.
El crudo Brent aumentó 35 centavos (0,5%) para ubicarse en 67,09 dólares por barril, mientras que el West Texas Intermediate (WTI) ganó 44 centavos (0,7%) y cerró en 65,55 dólares.
Según Randall Rothenberg, analista de la firma estadounidense Liquidity Energy, los precios se vieron respaldados por datos alentadores provenientes de China. Una encuesta del sector privado reveló que la actividad manufacturera en el país asiático volvió a expandirse en junio, lo que sugiere una mayor demanda energética.
Además, se espera que Arabia Saudita incremente sus precios de venta para el crudo de agosto dirigido a Asia, alcanzando su nivel más alto en cuatro meses. También influye la solidez de las primas del crudo ruso ESPO Blend, lo que refuerza la percepción de un mercado regional robusto.
Sin embargo, las ganancias del petróleo se mantuvieron limitadas ante la posibilidad de que la OPEP+ anuncie un nuevo aumento de producción. Cuatro fuentes del grupo consultadas por Reuters indicaron que se prevé un incremento de 411.000 barriles diarios en agosto, en línea con los ajustes realizados entre mayo y julio.
«Todas las miradas estarán puestas en la decisión de la OPEP+ durante el fin de semana, cuando se espera que el grupo añada otros 411.000 bpd en un esfuerzo por ganar más cuota de mercado, principalmente frente a los productores de esquisto estadounidenses», señaló Alex Hodes, analista de StoneX.
El contexto actual también refleja tensiones internas dentro del bloque petrolero. Kazajistán, miembro de la OPEP+ y uno de los mayores productores del mundo, elevó su producción en junio hasta igualar su récord histórico, según una fuente consultada por Reuters. Arabia Saudita, por su parte, incrementó sus exportaciones de crudo al ritmo más rápido del último año, de acuerdo con datos de la firma Kpler.
Finalmente, los inversores mantienen la cautela ante la proximidad del 9 de julio, fecha límite para definir la posible imposición de nuevos aranceles por parte del presidente estadounidense Donald Trump, en el marco de las tensas negociaciones comerciales.