En lo que va de 2025, el oro ha sido uno de los activos más beneficiados, puesto que desde enero el metal precioso ha incrementado alrededor de un 26% su valor.
El banco de inversión más grande de mundo, JP Morgan, estimó que el oro podría cotizarse a US$ 6,000 la onza hacia 2029, si se da un cambio en las carteras de inversión a nivel mundial.
La institución financiera destacó que si los inversionistas internacionales mueven el 0.5% de sus activos expuestos en Estados Unidos hacia el oro físico, el impacto haría que los precios del metal se disparen.
Es importante apuntar que el oro representa solo el 4% del mix global de activos, por lo que su oferta crece de manera limitada.
Natalia Kaneva, estratega de materias primas de JP Morgan, destacó que la situación actual marcada por los aranceles, las tensiones geopolíticas y la pérdida de confianza en el dólar, empuja a muchos inversores a replantearse el papel del oro como refugio estructural.
“El privilegio exorbitante del dólar está siendo revaluado. Aunque este escenario es hipotético, ilustra por qué seguimos estructuralmente alcistas con el oro”, enfatizó según publicó BitFinanzas.
El activo más beneficiado
En lo que va de 2025, el oro ha sido uno de los activos más beneficiados, puesto que desde enero el metal precioso ha incrementado alrededor de un 26% su valor y superó los US$ 3,500 por onza en el mes de abril, alcanzando el máximo histórico.
El oro ha ganado un 5% adicional en su precio desde que el presidente de EEUU, Donald Trump, anunció la imposición de aranceles, lo que ha reforzado el perfil de este metal como cobertura ante riesgos comerciales y monetarios.