Rio Tinto y Hancock invertirán US$1.600 millones en nuevo proyecto de mineral de hierro en Pilbara

proyecto de cobre Resolution, de Rio Tinto, en EEUU
Rio Tinto.

Rio Tinto y Hancock Prospecting anunciaron una inversión conjunta de US$1.610 millones para desarrollar el proyecto Hope Downs 2 en la región de Pilbara, Australia Occidental. Del total, Rio Tinto aportará US$800 millones. Esta iniciativa marca un nuevo paso en la estrategia de ambas compañías para asegurar el suministro sostenido de mineral de hierro, clave para la producción mundial de acero.

El director ejecutivo de Rio Tinto Iron Ore, Simon Trott, destacó que “la aprobación de Hope Downs 2 es un hito clave para Rio Tinto, ya que invertimos en la próxima generación de minas de mineral de hierro en Pilbara.”

El proyecto abarcará los yacimientos Hope Downs 2 y Bedded Hilltop, propiedad conjunta de Rio Tinto y Hancock. Ambos depósitos ya cuentan con todas las aprobaciones necesarias por parte de los gobiernos estatal y federal.

Con una capacidad combinada de 31 millones de toneladas anuales, los nuevos yacimientos asegurarán la continuidad operativa del complejo Hope Downs. Además, forman parte de una estrategia más amplia de Rio Tinto, que planea invertir más de US$13.000 millones entre 2025 y 2027 en nuevas minas, plantas y equipos.

La iniciativa también contempla infraestructura complementaria como caminos de acceso, cruces ferroviarios y una reubicación de 6 kilómetros de la Gran Carretera del Norte. El mineral extraído será transportado a Hope Downs 1 para su procesamiento, con el inicio de las operaciones previsto para 2027.

Durante la fase de construcción se generarán más de 950 empleos, y una vez en operación, el proyecto contribuirá a mantener alrededor de 1.000 puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo en el área de Greater Hope Downs.

Trott subrayó que estas inversiones permitirán sostener la producción de Pilbara en las próximas décadas, “impulsando el empleo, las empresas locales y las economías estatales y nacionales.”

Pilbara ha sido una región clave en el suministro global de acero durante más de 60 años, y con este proyecto, se consolida como pilar estratégico del desarrollo minero australiano.