El cobre es probablemente el primer mineral crítico entre todos lo demás. El cobre es el mineral de la nueva revolución industrial/tecnológica y de allí su importancia en la geopolítica internacional. No podemos desligar la geopolítica del cobre. Eso lo ha entendido bien Trump, aunque antes Biden también lo supo. El Perú apenas exporta 5% de mineral de cobre a USA.
De tal manera que Trump acaba de imponerle una nueva tarifa al cobre importando desde otros países, cualquiera sea el “esfera de influencia”. La idea de Trump es estimular la producción de cobre interna no obstante es un escenario de mediano y largo plazo porque construir una mina demora allá aproximadamente una década a menos. Lo que ha generado en el corto tiempo es un alza en el precio del mineral rojo aunque. Chile mira con prudencia.
Trump alega que la economía de USA no puede estar preso de la producción y sobre refinamiento de cobre de otros países, sobre todo China. Hay entonces un movimiento geopolítico en las decisiones de Trump.
Que nos quede claro entonces que no estamos en “aguas mansas” sino sobre todo en una dialéctica entre granes estados y sus economías que se miden entre ellas: China y USA. La decisión de Trump por tanto no corresponde solo un posicionamiento de la economía sino a fortalecer la posición de USA en el mercado y su permanencia como el país líder de la economía mundial.
Aún no se sabe la repercusión en el mediano plazo de la decisión del presidente Trump pero lo único seguro es que la demanda del cobre continuará. USA, sabe que la economía mundial dependerá de los minerales críticos cuya producción se ubica en América como en África. Por ejemplo, Biden dispuso el financiamiento del puerto Lobito en el Congo con la finalidad de hacerse de un lugar en este estratégico país.
El cobre tiene ya una propia dinámica geopolítica. China ha preparado su estrategia y plantea un tren desde Brasil a China y que es probable que pase por el Perú. No sabremos cuál será la reacción de Trump ni del establishment norteamericano pero la decisión es soberana el Perú y en cualquier caso tendrá la última palabra.