Con más de 300,000 millones de toneladas de recursos globales y un mercado de fertilizantes en base a este insumo que superará los US$ 97 mil millones en el 2032, el Perú busca posicionarse como un proveedor confiable desde Piura y otras regiones con alto potencial geológico.
El fosfato mineral es un compuesto químico natural que contiene fósforo, fundamental para la vida y la agricultura. Hallado en rocas y sedimentos marinos, se utiliza principalmente en la fabricación de fertilizantes, alimentos para animales y aplicaciones industriales.
El Investigador e Ingeniero Geólogo Juan Antonio Zegarra Loo, señaló que, a nivel mundial, existen tres tipos de yacimientos de roca fosfórica: sedimentarios, ígneos y biogenéticos, siendo estos últimos representados por depósitos como el guano. “Desde una perspectiva económica, los yacimientos sedimentarios de origen marino son los más relevantes. Allí, el elemento responsable de la mineralización es el fluorapatito, particularmente en su variedad conocida como francolita, que es un fosfato de calcio carbonatado, característico de las rocas sedimentarias.
Este tipo de formación se encuentra comúnmente en areniscas”. Agregó que, a veces, durante la exploración, se recolectan muestras en calizas, pero en realidad la presencia de fosfatos en estos es poco habitual. “Su ubicación predominante es en las areniscas, especialmente en ambientes sedimentarios marinos. En estos yacimientos, la mineralización suele presentarse en capas estratificadas dentro de cuerpos rocosos, formando horizontes bien definidos. Dentro de estas areniscas, la fosforita se encuentra en forma de pellets o peloides, que son pequeñas partículas del tamaño aproximado de un grano de arena”. Con respecto a los yacimientos de tipo ígneo, el mineral predominante es el apatito. “Sin embargo, este tipo de depósito no tiene tanta relevancia económica a nivel mundial. Existen algunos casos de explotación, como en Rusia, donde se extraen fosfatos a partir de rocas ígneas, pero en general, no representan una fuente principal de producción por sus menores concentraciones y mayores costos asociados”.
Producción mundial
El fosfato es un mineral industrial no metálico en cuya composición química se incluye, además de fósforo, elementos como calcio, hierro, aluminio, magnesio y potasio.
“Presenta colores y brillos variables, desde vítreo hasta mate, dependiendo de su composición y nivel de impurezas. El 90% de la producción es utilizada principalmente para la fabricación de fertilizantes y lo restante en diversos productos químicos”, señaló la Ingeniera Melisa Ramírez, Presidenta del Capítulo de Ingeniería Geológica del CIP-CD Lima.
El mercado de roca fosfórica mantiene un crecimiento constante debido a su papel fundamental en la agricultura mundial. Con el aumento de la población global y la creciente demanda de alimentos, la necesidad de fertilizantes fosfatados que mejoran el rendimiento de los cultivos continúa en ascenso, especialmente en economías emergentes como India y China.
Los avances en tecnologías mineras, como los procesos automatizados de extracción y beneficio, están incrementando la efi ciencia productiva y reduciendo el impacto ambiental. Paralelamente, la recuperación sostenible de fosfato -a partir de aguas residuales y fuentes alternativas- también está ganando terreno.
Asimismo, la roca fosfórica es empleada con mayor frecuencia en sectores más allá del agrícola, como la producción de suplementos alimenticios para animales, el tratamiento de aguas y la fabricación de materiales para baterías de vehículos eléctricos.
El Ingeniero de Minas José Luis Vega Farfán, Docente Principal en la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de Piura (UNP), manifestó que el liderazgo de la producción global con respecto a este mineral lo mantienen desde hace varios años China, Marruecos y Estados Unidos. “En conjunto, estos países representan aproximadamente el 75% de la oferta mundial de roca fosfórica. Todos ellos cuentan con yacimientos que disponen de un gran volumen de reservas y recursos”.
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