African Rainbow Minerals (ARM) confirmó que los ensayos de su innovador sistema de corte en el arrecife UG2 registran resultados sobresalientes, lo que proyecta una transformación en la eficiencia, la seguridad y la sostenibilidad de la minería de metales del grupo del platino (PGM).
El sistema de corte fue diseñado específicamente para el arrecife UG2, una estructura tabular de apenas 60 centímetros de ancho que concentra altos contenidos de PGM. La tecnología, desarrollada en conjunto con Herrenknecht y Master Drilling, incorpora una máquina perforadora de arrecifes capaz de ejecutar cortes continuos y selectivos sin uso de explosivos. Las pruebas en condiciones artificiales confirmaron su eficacia en diferentes densidades y durezas de material.
La mecanización busca mayor selectividad y menores costos
El diseño selectivo del corte permite elevar las leyes de cabeza, optimizar la recuperación metálica y reducir costos unitarios. Además, minimiza el riesgo operativo al eliminar explosivos y disminuye el volumen de relaves, lo que implica un menor impacto ambiental y menores requerimientos de almacenamiento. Según Mike Schmidt, presidente ejecutivo de ARM, el sistema “está cumpliendo y superando todas las expectativas” al mejorar seguridad, productividad y eficiencia.
¿Cuándo iniciarán las pruebas subterráneas?
La compañía ya completó la instalación de la infraestructura inicial en Bokoni. La puesta en servicio está programada para noviembre de 2025, mientras que la perforación de túneles alcanzará un avance significativo en marzo de 2026. ARM proyecta tomar una decisión final de inversión (FID) hacia junio de ese mismo año, una vez culminadas las validaciones de campo.
ARM proyecta la transformación productiva de Bokoni
El plan de desarrollo busca reorientar Bokoni, tradicionalmente asociado al arrecife Merensky, hacia una operación mecanizada sobre UG2. La mina cuenta actualmente con una planta de 60,000 toneladas/mes y una planta de cromo, pero la hoja de ruta contempla una expansión progresiva a 120,000 toneladas y finalmente a 240,000 toneladas en un plazo de tres años.
El compromiso de inversión se mantiene en el corto plazo
El gasto de capital previsto supera los R1,000 millones anuales (aprox. US$53 millones), cifra que se mantendría en los próximos tres años, sujeta a la aprobación de la junta directiva y a los resultados de las pruebas de viabilidad. Esta inversión está orientada a consolidar la mecanización y garantizar un modelo operativo sostenible en el largo plazo.
Una apuesta estratégica por el futuro del UG2
Para ARM, el UG2 se mantiene como el recurso más atractivo en términos de grado y retorno económico. La empresa considera que esta innovación no solo optimizará la rentabilidad de Bokoni, sino que también sentará un precedente en la mecanización de minería subterránea en África, con impactos directos en seguridad, productividad y sostenibilidad ambiental.