Pese a ser 28% más barato que el GLP, el uso de GNV no despega por falta de liderazgo estatal y trabas normativas.
En medio del alza global de los precios del crudo debido al conflicto entre Israel e Irán, el Perú se ve cada vez más expuesto a los impactos de esta volatilidad, dado que importa buena parte de sus derivados. A pesar de contar con una fuente de energía más económica y estable como el gas natural vehicular (GNV), su masificación avanza con lentitud. Según cifras de Infogas, en los primeros cinco meses del 2025 se registraron 16,813 conversiones a GNV, una caída del 20% frente al mismo periodo del año anterior.
El contraste entre la autosuficiencia en gas natural y la dependencia de importaciones de GLP y diésel resalta aún más. Mientras el consumo nacional de combustibles llegó a casi 300,000 barriles diarios, la refinación local cubre solo 225,000. En ese escenario, el GLP se posiciona como el combustible de mayor crecimiento, pese a que su precio es menos estable y el Perú importa el 34% de lo que consume. En cambio, el GNV, que es 28% más barato, no logra consolidarse.
De acuerdo con la Asociación Automotriz del Perú (AAP), el uso masivo del GNV podría representar un ahorro anual estimado en S/229 millones para los usuarios en comparación con los gasoholes. Sin embargo, diversos factores dificultan su expansión: falta de incentivos regulatorios, trabas para deducción de impuestos en vehículos convertidos y una ley de masificación que, según expertos, “se queda corta” en lo operativo, pues no establece mecanismos claros para acelerar concesiones ni ampliar redes en regiones aún no conectadas.
Para Alberto Morisaki, gerente de Estudios Económicos de la AAP, el problema central es la falta de liderazgo estatal. Aunque el programa Ahorro GNV busca fomentar la conversión mediante el fondo FISE, las cifras muestran una caída sostenida en el ritmo de adopción. El llamado de los gremios y expertos es claro: urge implementar políticas más eficaces para aprovechar el potencial del gas natural y reducir la dependencia de combustibles importados.