El especialista Luciano Codesseira planteó que Argentina puede consolidarse como proveedor confiable de gas natural hacia Chile si prioriza infraestructura, contratos a largo plazo y un marco regulatorio estable.
Durante un seminario organizado por la consultora MEGSA, Luciano Codesseira, director ejecutivo de Gas Transition Consultant y codirector del Instituto de Energía de la Universidad Austral, analizó las perspectivas energéticas regionales con énfasis en la exportación de gas natural argentino hacia Chile. Según el experto, esta relación binacional podría redefinir el posicionamiento internacional de Argentina como proveedor de GNL y equilibrar su balanza comercial energética.
Codesseira repasó la evolución de los vínculos energéticos entre ambos países, recordando que en los primeros años del 2000 Argentina fue un abastecedor confiable de gas para Chile. Sin embargo, las crisis internas forzaron una interrupción en el suministro, lo que llevó a Chile a diversificar su matriz energética e invertir en infraestructura propia, como las plantas de regasificación de Quintero y Mejillones. Desde 2018, sin embargo, se ha registrado una recuperación sostenida: actualmente, más de la mitad del gas natural que importa Chile proviene de Argentina.
En su exposición, el especialista advirtió sobre dos visiones contrapuestas que dificultan el debate energético entre ambos países. Por un lado, quienes desconfían de la capacidad argentina para cumplir con contratos a largo plazo, y por otro, quienes creen que el flujo exportador crecerá automáticamente sin mayores desafíos. Frente a estas posturas, Codesseira propuso un enfoque equilibrado: desarrollar infraestructura adecuada, establecer contratos firmes y generar marcos regulatorios claros que respalden la continuidad de los envíos.
Para Codesseira, Vaca Muerta es el activo estratégico más relevante que posee Argentina actualmente en materia energética. Con niveles comprobados de productividad y obras clave como el Gasoducto Néstor Kirchner, el yacimiento puede convertirse en una plataforma sólida de exportación no solo regional sino también global, sobre todo si se concreta la infraestructura marítima en Sierra Grande.