MINERÍA. Control de riesgos en actividades rutinarias de la minería a través de la percepción. Las estadísticas sobre accidentes por tipos de actividades señalan que muchas veces estos se producen al realizar tareas simples o cotidianas, conocidas comúnmente como actividades rutinarias. En ellas generalmente los trabajadores no evalúan riesgos porque están habituados a realizarlas sin antes ponerse a pensar qué podría pasar o salir mal.
Así lo señaló, este 1 de junio, el Ing. Luis Huaytán, capacitador y consultor en seguridad minera de H&S Consultoría en Seguridad Industrial S.A.C., quien brindó la conferencia “Control de riesgos en actividades rutinarias a través de la percepción de riesgo”, en el marco del tradicional Jueves Minero, organizado por el Instituto de Ingenieros de Minas del Perú (IIMP).
El expositor indicó que la percepción del riesgo es una habilidad innata y a la vez potencialmente desarrollada como elemento conductual de prevención. “La percepción de riesgo significa que el trabajador ve la posibilidad de daño en la actividad que está realizando, la herramienta que está usando o en el área al que está ingresando, apuntó.
Pero ¿por qué el trabajador no reconoce amenaza de riesgo en algunas actividades? Porque no ‘percibe’ el riesgo, indicó el especialista Huaytán. “Para muchos trabajadores las actividades rutinarias representan riesgo cero, por ello no implementan controles”, explicó.
La percepción de riesgo depende principalmente de las experiencias vividas, los conocimientos, la actitud, así como los valores individuales y sociales.
Por ejemplo, la percepción de riesgo se incrementa cuando se ha sufrido o presenciado un accidente. “Eso no quiere decir que debemos esperar sufrir daño para elevar nuestra percepción del riesgo”, acotó.
Para el Ing. Huaytán la buena noticia es que la percepción de riesgo tiene naturaleza cognitiva. Es decir, se puede enseñar y aprender, y no dejar que la experiencia lo haga. Para ello debemos plantear estrategias de formas de pensamiento y actuación como la utilización de “los cuatros qué”: ¿qué me puede dañar?, ¿qué me puede cortar?, ¿qué me puede caer? o ¿qué me puede impactar?
También se puede recurrir al análisis de la causalidad de los accidentes conjuntamente con los trabajadores. El objetivo es lograr que el trabajador sea consciente de que también se puede dañar severamente en las actividades rutinarias. Para ello es necesario seguir algunas sugerencias, remarcó.
En primer lugar, se debe propiciar una cultura de seguridad que aliente la percepción de los riesgos en actividades rutinarias, así como trabajar en la toma de decisión frente al riesgo.
En segundo lugar, es necesario difundir los accidentes y encontrar patrones de riesgo descontrolados que se podrían presentar en nuestras actividades. También formular medidas preventivas y tomar al proceso de Identificación de Peligros Evaluación de Riesgo y Control (IPERC) como una actividad de pensamiento constante.
El especialista Luis Huaytán es ingeniero industrial, especializado en seguridad industrial minera. Cuenta con maestrías en Sistemas Integrados de Gestión (UNMSM) e Ingeniería Industrial (UNI).
(Foto: Cortesía IIMP)
(JPC)