El ministro del Ambiente, Manuel Pulgar-Vidal, señaló hoy que el Perú apunta a lograr la meta de “cero deforestación” al 2021, para lo cual implementa una política con diversas medidas, a fin de lograr un equilibrio entre la tala de los árboles y la reforestación.
“Hay una meta que el Perú planteó el año 2009 y con ella nos estamos manejando: es que al 2021 tengamos una meta de deforestación cero, es una meta neta, es decir que se reponga aquello que se deforesta”, subrayó.
El ministro participó en la inauguración del taller internacional sobre el desarrollo sostenible y los bosques, donde indicó que este tema se abordará en la próxima cumbre mundial sobre cambio climático COP20, en la cual participarán más de 15,000 personas de 195 países.
Pulgar Vidal indicó que la deforestación históricamente acumulada en el Perú es alrededor de 9 millones de hectáreas en la amazonía, mientras que los estimados ubican la tasa anual de deforestación en 120,000 hectáreas.
Asimismo refirió que las tres causas de deforestación de los bosques amazónicos en el país son la minería ilegal que también contamina; la agricultura producida por la migración (la más importante); y la tala ilegal, la cual, si bien no tiene un impacto significativo, está asociada a mafias y depredación de especies finas como el cedro y la caoba.
Para combatir la deforestación, destacó que a iniciativa de su portafolio se aprobó la Ley de Servicios Ecosistemicos, en la cual se reconoce que los bosques y las cuencas prestan servicios que deben ser retribuidos.
Asimismo, recordó que el Ministerio del Ambiente recientemente emitió un inventario sobre el stock de carbono depositado en los bosques, denominado “vuelo forestal”.
Otra medida fundamental, dijo es el trabajo de reglamentación de La Ley Forestal que realiza el Ministerio de Agricultura a través del Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (Serfor).
También destacó que el Perú suscribió una carta de intención con el Gobierno de Noruega, durante la cumbre climática de la ONU, realizada el 23 de setiembre en Nueva York, y que debe representar 300 millones de dólares en donaciones en función al cumplimiento de ciertas metas propuestas.
“Tenemos también un conjunto de medidas que tienen que ver con el valor del bosque en pie y todo lo que el Perú está haciendo en este mecanismo nuevo, denominado Reducción de Emisiones por Degradación y Deforestación (REDD)”, agregó.
Finalmente, consideró necesario tener cuidado en los títulos y el cambio del uso de suelos aprobados a nivel de los gobiernos regionales, porque en algunos casos está comprobado que no se están realizando bien y por ello urge corregir estos aspectos.
“El bosque va a tener un valor, no solamente por los bonos del carbono, sino porque es el que resguarda cultura, biodiversidad, seguridad jurídica y da beneficios a los pobladores, y el bosque va a seguir siendo importante en el debate climático, de sostenibilidad y de la economía verde”, puntualizó.
Fuente: Andina