En el caso del níquel, la recuperación se debió principalmente a un fuerte aumento de la producción de arrabio de níquel en Indonesia.
La fundición mundial de cobre repuntó ligeramente en agosto, debido a una mayor actividad en Sudamérica, Europa y África.
Esas regiones compensaron la menor producción en China, según publicación en Reuters.
La información se basó en los datos de la vigilancia por satélite de las plantas de procesamiento de metales.
Regiones y países
En Chile, las operaciones de Altonorte de Glencore y Chuquicamata de Codelco tuvieron altos niveles de actividad.
Así, comunicó el corredor de materias primas Marex y SAVANT, el servicio de análisis satelital que Marex lanzó con Earth-i en 2019.
En tanto, una ola de calor en China obligó a las autoridades a racionar la energía a las fundiciones, siendo el este y el noreste las zonas más afectadas.
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Cobre y níquel
Earth-i, especializada en datos geoespaciales, rastrea fundiciones que representan el 80%-90% de la producción mundial.
Su índice de dispersión mundial del cobre, que mide la actividad de las fundiciones, subió a 48,6 en agosto, frente a 46,5 en julio.
El índice de dispersión de América del Sur se recuperó hasta 52,1 en agosto, frente a los 37,7 del mes anterior, que había sido el más bajo desde diciembre de 2021.
Según el índice de dispersión indicó que las fundiciones están operando al nivel medio de los últimos 12 meses.
También hay un segundo índice que muestra el porcentaje de fundiciones activas.
En lo que respecta al níquel, la actividad mundial de fundición se recuperó en agosto, tras caer en julio al nivel más bajo registrado en los 5 años y medio de historia de los datos.
El índice de dispersión mundial del níquel subió a 50,1 en agosto desde el mínimo histórico de 37,8 en julio.
La recuperación se debió principalmente a un fuerte aumento de la producción de arrabio de níquel en Indonesia, mientras que la actividad cayó en China.
El arrabio de níquel es un sustituto del níquel refinado con menor contenido de níquel.
Los altos precios de la energía en Europa hicieron que las plantas de níquel de la región funcionaran «de forma intermitente», según el comunicado.
