Un grupo de líderes ambientales de la Reserva Nacional de Tambopata, considerada una de las 25 zonas de mayor biodiversidad del planeta, presentó este miércoles una campaña para recaudar fondos para proteger está área de la Amazonía de Perú de la minería ilegal.
Se trata de ‘Tambopatas’, un patronato que busca conseguir fondos para «hacer sostenible» la labor de guardia ambiental que desde el 2001 asumió voluntariamente el Comité de Gestión de la Reserva Nacional de Tambopata, ubicada en la región de Madre de Dios, fronteriza con Bolivia y Brasil.
«Buscamos mayores recursos que nos permitan realizar todas las actividades de guardianía y monitoreo de la reserva , que siempre han tenido carencias por la falta de fondos», señaló el presidente del Comité de Gestión de la Reserva Nacional de Tambopata, Víctor Zambrano.
Conformada por 38 integrantes, este comité ha sido clave para que la Fiscalía persiga la minería ilegal de oro, que ha deforestado 9,500 hectáreas en la zona de amortiguamiento de la reserva, un espacio de transición entre el área natural y su entorno donde también está prohibida esa actividad, recordó Zambrano.
Además, este grupo conformado por indígenas, campesinos y concesionarios reforestadores ha propiciado que el Gobierno declarara en febrero cuatro municipios de la provincia de Tambopata en estado de emergencia, y que finalmente esta zona se encuentre en un 80% liberada de la minería ilegal.
Esto ha sido gracias en parte a la ofensiva del Gobierno peruano en La Pampa, el mayor campamento de mineros ilegales de la Amazonía, que ha sido desalojado hace unos meses con la presencia permanente de policías y militares.
«El trabajo en cuanto a presencia de fuerzas del orden ha sido fundamental, unido con el protagonismo del Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado (Sernanp) con sus guardaparques, que ahora siguen contribuyendo para ver los focos posibles de impacto, no solo dentro sino fuera de la Reserva», señaló Zambrano.
El líder ambiental manifestó que ahora se debe preservar la labor del Gobierno nacional y regional para recuperar las áreas degradadas y para ello consideran que su trabajo voluntario de defensa ambiental debe ser repotenciado.
«Somos los ojos y oídos de las autoridades por preservar la reserva. Somos y hemos sido, por muchos años, escudos de la reserva, y por ello hemos sido víctimas de las redes de minería ilegal, que nos amenazan y hasta nos desaparecen porque no tenemos nada, solo el apoyo de nuestros aliados», anotó Zambrano.
Con la creación del patronato de «Tambopatas», este grupo de defensores ambientales busca asegurar que su labor de monitoreo sea ahora más eficaz en favor de la reserva, y que puedan sumar transmisiones georeferenciales a sus fotografías y llamadas telefónicas de denuncia a las autoridades.
Una de las maneras de recolectar fondos será la venta de gorras y camisetas que promueven la solidaridad y el compromiso ciudadano con la conservación de la Reserva Nacional Tambopata, que abarca más de 270,000 hectáreas de selva amazónica y es uno de los lugares con mayor diversidad biológica del planeta.
*foto referencial
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