MINERÍA. “Es necesario adecuar la ley general de minería a la nueva realidad”. Tras un 2016 en que se concretaron todos los grandes proyectos que existían en cartera, el gran desafío de la industria minera peruana para el 2017 es no solo consolidar lo logrado sino, más importante aún, construir nuevas bases para darle sostenibilidad a su desarrollo futuro. ¿Qué acciones concretas deben adoptarse para conseguir ese objetivo? Con visión integral y sólidos argumentos, Marcial García, Socio de Impuestos de EY Perú, las enumera y sustenta en la presente entrevista.
Transcurridos siete meses de nueva gestión gubernamental, ¿cuál es el balance de las acciones emprendidas por el Ejecutivo en el sector minero?
El gobierno ha dictado una serie de medidas que apuntan en la dirección correcta. Por ejemplo, en el marco de la delegación de facultades para legislar en materia económica, el Poder Ejecutivo aprobó en enero pasado el Decreto Legislativo 1320 que modifica los artículos 40 y 41 de la Ley General de Minería para asegurar la continuidad de las inversiones mineras.
Con esa modificación, las empresas mineras dejarán de pagar altas penalidades cuando no alcancen la producción mínima a partir del décimo primer año de entregada la concesión minera. Asimismo, se incrementó de 10 a 30 años el plazo máximo para la caducidad de una concesión en caso que no alcance la producción mínima requerida. Esta modificación rige a partir del 1 de enero del 2019.
Se trata de una medida sumamente positiva ya que desarrollar un proyecto minero es una tarea de largo plazo. Hay que conseguir permisos, obtener la licencia social y si la exploración es exitosa, el financiamiento. En general, tardan largos años en poder pasar de la etapa de exploración a la de explotación; incluso décadas. Basta recordar que desde su descubrimiento hasta su puesta en marcha, el megaproyecto Las Bambas, por ejemplo, tomó más de 90 años, Toromocho 80 años y Constancia más de 20 años.
Agotados en 2016 los megaproyectos mineros, se sostiene que este año debemos apuntar hacia el desarrollo de los medianos proyectos. ¿Cree usted que existen las condiciones para lograrlo?
Existe un enorme potencial de desarrollo minero, producto de la favorable geología del país. Las inversiones mineras proyectadas para los próximos años ascienden a US$ 46,996 millones, según el último reporte del MINEM. 61.34% son proyectos de cobre, 14.68% polimetálicos y 11.28 de hierro. La meta del gobierno es que se concreten US$ 14,000 en los próximos 5 años.
Los proyectos identificados están ubicados en distintos puntos del país, principalmente en Cajamarca, Apurímac, Moquegua y Arequipa, que concentran el 67,4%.
La cartera estimada de inversión en minería se encuentra compuesta por 47 principales proyectos que han sido clasificados en las siguientes categorías: ampliaciones, con EIA aprobado, con EIA presentado y en exploración.
Entre ellos destacan el proyecto Quellaveco en Moquegua de Anglo American, que el gobierno espera que se empiece a construir en julio del 2018, con una inversión de US$ 5,000 millones, ya habiéndose invertido unos US$ 1,000 millones. De hecho, según ha trascendido el primer ministro Fernando Zavala y el titular de Economía y Finanzas, Alfredo Thorne, se habrían reunido con el presidente ejecutivo (CEO) de Anglo American en Davos, Suiza para expresarle el deseo del gobierno de que la mina pueda comenzar pronto sus operaciones, esperando que sea antes del 2021.
También tenemos a Tía María de Southern, Corani de Bear Creek y Ollachea de Minera IRL, que ya tienen EIA aprobado. La recuperación de los precios de los minerales, podría contribuir a que esos proyectos sean desarrollados y puestos en marcha. Recibir un impulso del gobierno también ayudaría bastante.
Vea la revista completa AQUÍ
